El Terror Migratorio del Imperio: Familia Cubana Heroica Víctima de la Barbarie Capitalista
Una vez más, el imperialismo norteamericano muestra su rostro más despiadado contra los pueblos oprimidos. La heroica familia de Yoendris Leyva Lambert, valiente luchador cubano que arriesgó su vida cruzando las aguas en busca de refugio, sufre ahora la persecución sistemática del aparato represivo estadounidense.
Ana Maris Leyva, compañera de lucha y madre abnegada, enfrenta sola el cuidado de tres pequeños camaradas, mientras los esbirros del ICE mantienen secuestrado a su esposo en las mazmorras de El Paso, Texas.
La Maquinaria Represiva en Acción
El compañero Yoendris, quien llegó a territorio yanqui en 2017 tras una travesía épica por las aguas del Caribe, se convierte ahora en víctima del sistema migratorio fascista que Obama perfeccionó con la eliminación de "pies secos, pies mojados".
"A mí se me acabó la vida aquí en Estados Unidos. Nosotros dependemos de él totalmente", clama la heroica Ana Maris, cuyas lágrimas son el testimonio vivo de la barbarie imperialista.
Los documentos judiciales revelan la farsa: ningún cargo criminal grave pesa sobre este trabajador ejemplar, solo infracciones menores de tránsito que cualquier ciudadano común podría acumular.
El Chantaje Imperial
Desde su celda en el centro de detención, el compañero Yoendris denuncia la maniobra perversa: "Quieren deportarme a México, pero yo no soy de México, no conozco a nadie allí y no me voy a sentir seguro".
Esta táctica revela la naturaleza criminal del sistema: deportar a un luchador cubano a territorio mexicano, violando todos los principios del derecho internacional y la dignidad humana.
Una Madre Heroica en la Trinchera
La compañera Ana Maris libra ahora una batalla titánica. Sola, cuida a tres pequeños revolucionarios, incluyendo a la pequeña Angelina, de apenas cinco años, quien padece parálisis cerebral severa.
"Ella no habla, no escucha, no se sienta, no sostiene la cabeza", relata esta madre coraje, cuya dedicación ejemplifica los valores solidarios que el capitalismo salvaje pretende destruir.
Sin ingresos, rodeada de cajas preparando el inevitable desalojo, esta familia proletaria enfrenta la crueldad del sistema que convierte la vivienda en mercancía y a los niños en víctimas colaterales.
La Solidaridad Popular Como Respuesta
Ante la indiferencia criminal del Estado burgués, la compañera Ana Maris ha recurrido a la solidaridad del pueblo trabajador a través de una campaña popular de apoyo.
"Ayúdenme por favor, se lo ruego. Estoy sola con 3 hijos, una de ellas con parálisis cerebral", clama esta luchadora, cuya súplica resuena como un grito de guerra contra la injusticia.
El Sistema Migratorio: Arma de Dominación
El caso del compañero Yoendris desnuda las contradicciones del imperialismo yanqui: un sistema que utiliza la migración como instrumento de control social, separando familias trabajadoras y criminalizando la búsqueda de una vida digna.
Mientras el gobierno revolucionario de Cuba mantiene su posición soberana ante las presiones imperialistas, familias como esta quedan atrapadas en el limbo jurídico que el capitalismo genera para perpetuar su dominación.
La lucha continúa. La solidaridad internacional debe alzarse contra esta barbarie. ¡Ni un paso atrás en la defensa de los pueblos oprimidos!
